Efectos del dióxido de carbono en los océanos

El dióxido de carbono es un gas producido naturalmente a través de la respiración de animales y la degradación de la materia orgánica. El dióxido de carbono se disuelve en el agua para formar ácido carbónico, el cual reduce el pH del agua. Los océanos son un sumidero de carbono que permite almacenar dióxido de carbono durante cientos de años. Sin embargo, cuando hay demasiado dióxido de carbono en el océano, puede haber efectos adversos en la vida marina.

Y una Los animales y las bacterias aeróbicas consumen oxígeno y liberan dióxido de carbono a través del proceso de respiración. Las plantas usan este dióxido de carbono en el proceso de la fotosíntesis, lo que causa la producción de oxígeno. Debido a que la fotosíntesis disminuye dramáticamente en la noche, las plantas consumen menos dióxido de carbono y producen menos oxígeno. Si el nivel de dióxido de carbono es muy alto (o el nivel de oxígeno es muy bajo), podría dañar la vida marina.

¿Por qué es importante?

Ciertos niveles de dióxido de carbono son necesarios en la naturaleza y en el medio ambiente marino. En general, el océano contiene aproximadamente 90 ppm de dióxido de carbono. Sin embargo, el agua estancada o contaminada puede generar grandes cantidades debido a la descomposición orgánica o mineral. El ácido carbónico resultante puede hacer al agua corrosiva y tóxica para la vida acuática. En la industria, se hacenssii reaccionar grandes cantidades de dióxido de carbono con amoníaco para formar fertilizantes. Los fertilizantes llegan a los océanos por medio de la erosión y desagües de aguas pluviales.

A medida que el dióxido de carbono se libera en la atmósfera, de forma natural o por combustibles fósiles, la mayor parte de este gas se disuelve en los océanos a través del proceso de interacción océano-aire. El uso incrementado de los combustibles fósiles ha provocado que aumenten los niveles de dióxido de carbono en los océanos, causando que se vuelvan más ácidos. La disminución del pH debido al aumento del dióxido de carbono dificulta la producción de carbonato de calcio que muchos animales, como moluscos y corales, necesitan para formar sus esqueletos y conchas. Se están realizando estudios para determinar si hay efectos fisiológicos en los animales y plantas.

Si bien el dióxido de carbono es importante en industrias como las que lo utilizan para producir bebidas carbonatadas, extinguidores de incendios y combustibles fósiles, también ha recibido mucha atención en los últimos años debido a su contribución al efecto invernadero.

Los niveles de dióxido de carbono en la atmósfera se han incrementado debido a los procesos industriales que emiten CO2, como la quema de combustibles fósiles (como carbón) parasisiSI hacer funcionar las plantas eléctricas y los automóviles, y calentar casas y negocios. La cantidad de dióxido de carbono proveniente de la respiración animal y la descomposición de la materia orgánica es diez veces mayor que la que se genera por los usos industriales. Sin embargo, el dióxido de carbono adicional que se ha liberado a la atmósfera como resultado de las actividades posteriores a la revolución industrial es suficiente para alterar el equilibrio fotosintético histórico.

Los científicos continúan estudiando los efectos del dióxido de carbono en los océanos, con énfasis en los arrecifes de coral, que se consideran las selvas tropicales del mar.  Ellos albergan miles de especies de todo tipo de organismos. Sin embargo, estos arrecifes necesitan mantener niveles contantes de temperatura y pH, los cuales se ven afectados por el incremento de dióxido de carbono. No solo muchas personas dependen de las plantas y los peces para sobrevivir, sino que toda la tierra depende de estos vastos ecosistemas. Los científicos deben estudiar y encontrar las formas para mantener un medio ambiente saludable para los corales.

A medida que se incrementan las emisiones de dióxido de carbono hechas por el hombre, los efectos se vuelven más severos; como resultado, muchos científicos creen que las políticas de control de emisiones son esenciales para limitar el impacto negativo del incremento de dióxido de carbono en la atmósfera, que a su vez vuelve a disolverse en los océanos.

¿Cómo se mide el dióxido de carbono?

El dióxido de carbono (como ácido carbónico) en la muestra de agua se neutraliza con una solución de hidróxido de sodio diluido a pH de 8.3 usando un indicador de fenolftaleína. Este proceso convierte el ácido carbónico en bicarbonato de sodio: CO₂ + H₂O  H₂CO₃ + NaOH  NaHCO₃ + H₂O

Hanna Instruments cuenta con el kit de pruebas químicas HI3818 que mide la concentración de dióxido de carbono en tres intervalos: 0 a 10 mg/L CO₂, 0 a 50 mg/L CO₂ y 0 a 100 mg/L CO₂. Este kit se suministra con todos los reactivos y equipos necesarios para realizar aproximadamente 110 pruebas.

A continuación, se muestra una tabla con las especificaciones del kit de prueba química para dióxido de carbono HI3818.